Ya ha llegado por fin la esperada vuelta al cole. Tod@s tenemos ganas de volver otra vez a la “normalidad” aunque ésta sea otra… yo siento ilusión por empezar a sentirme otra vez mamá trabajadora sin tener niños por casa y poder concentrarme y volver a ser productiva de nuevo.
Habrá gente que opinará de diferente forma… todo muy respetable… pero negar lo evidente… no creo que haya nadie que niegue tener ganas de volver a ver el país funcionando más o menos a un ritmo un poco más fluido y con más esperanza de que todo saldrá bien. El deseo por recuperar nuestra vida se hace manifiesto entre la población.
Aunque muchas madres, padres y docentes estén preocupados por la vuelta al colegio de nuestros niños y adolescentes, ya que el coronavirus genera miedo e incertidumbre. Y son dos sentimientos que nos han acompañado durante la evolución de los seres humanos a lo largo de la historia. El miedo, concretamente, tiene que ver con la angustia y la aprensión; y la incertidumbre es el reflejo de carencias como la falta de seguridad, de conocimientos y de certeza. Miedo e incertidumbre son emociones totalmente normales.
¡Pero ahora hay que confiar! Creo que es necesario que confiemos en los profesionales sanitarios (desde médicos hasta enfermeros o cuidadores), en los profesores y directores de las escuelas. Ellos son los principales interesados en que todo funcione de una forma responsable y coherente. Así podremos relajarnos todos y con la información necesaria poder actuar (vuelvo a repetir) de forma responsable y coherente.
Aprendizajes forzados, FLEXIBILIDAD y PACIENCIA
No podemos permitir que el miedo a qué pasará en el futuro nos paralice. Un aprendizaje forzado que hemos interiorizado durante la pandemia ha sido la FLEXIBILIDAD. Ya no podemos contar con una vida “planificada” a nivel personal ni profesional. Todo está en el aire. Ya no podemos organizamos agendas a semanas o meses vista… las rutinas (tan necesarias para conseguir una paz y tranquilidad emocional) tampoco las tenemos controladas. De un día para otro todo puede cambiar. Nos hemos visto obligados a aprender a vivir con flexibilidad. Y esto es también extrapolable a los niños. Es también un aprendizaje súperimportante para afrontar el futuro ya que ocasiona angustia. Como seres humanos controladores, nos sentimos vulnerables debido a esta situación, estamos perdidos y nos paralizamos.
Las respuestas inmediatas y la resolución de problemas en un “plis” también se han visto alteradas… La PACIENCIA es otro aprendizaje obligado durante este COVID19.
La frustración aparece de una forma incontrolada y estamos aprendiendo a adaptarnos.

Algunas recomendaciones
Algunas recomendaciones por parte de los sanitarios son que aún siendo conscientes de todo lo que nos está sucediendo… el hecho de reconocer las emociones que estamos viviendo nos ayudará a buscar soluciones y poner en marcha planes de acción para adaptarnos a esta situación imprevista. Además de intentar no ser tremendista y limitar el consumo de información a la que estamos expuestos constantemente a través de los medios de información, redes sociales o internet.
Otra recomendación es centrarnos en el ahora. Todo aquello que no podamos controlar no preocuparnos. Ocuparnos solo de aquello que sí dependa de nosotros. Y desdramatizar (evitar pensamientos negativos y exagerados) focalizándote en lo que sí está bajo tu control. Adaptándonos según vaya evolucionando la situación y dejándonos llevar, fluyendo tranquilamente.
Recuerda! Si hablamos de diseño e identidad corporativa, diseño web… En Cusidó Disseny te podemos ayudar a desarrollar una estrategia de márqueting y publicidad. ¿Quieres conocernos? ¿Quieres que hablemos? ¡Ponte en contacto con nosotros y te asesoraremos! Ponte en contacto con Mireia Cusidó 647938252 o Visita nuestra web www.cusidodisseny.com Síguenos en instagram, twitter o facebook @cusidodisseny